Page 14 - Teletrabajo
P. 14
Aunque teletrabajar permite un equilibrio funcional entre la vida familiar y laboral; si
ésta no se separa adecuadamente, ello puede influir negativamente en el
teletrabajador en términos de estrés y productividad (Havriluk Osio, Salud y
seguridad en el teletrabajo., 2015).
Se ha demostrado que los empleados que trabajan desde el hogar tienden a
trabajar más horas que cuando están trabajando en los locales, en parte porque el
tiempo para desplazarse al lugar de trabajo es sustituido por actividades laborales y
también debido a los cambios en las rutinas de trabajo y a la desaparición de los límites
entre el trabajo remunerado y la vida personal (OIT, El teletrabajo durante la
pandemia COVID-19 y después de ella, 2020).
Unos de los retos más difíciles para los teletrabajadores es que en muchas ocasiones
les ha tocado realizar actividades fuera de las horas laborales, lo que conduce a un
punto de vista distinto sobre el teletrabajo. Es fundamental que al momento de tomar
la decisión de trabajar de forma remota se establezcan condiciones de trabajo donde
se garantice que el teletrabajador cumplirá con las actividades establecidas y el
empleador respetará los horarios de trabajo, sin dejar de lado que el empleador se hará
responsable de cualquier accidente que suceda en el hogar en horario laboral.
De acuerdo a las leyes que se han creado con el fin de regular el teletrabajo, un
teletrabajador posee los mismos derechos que un trabajador, en todos los aspectos,
tanto salud como seguridad social, garantizando su bienestar físico y mental. Es
posible que durante la pandemia haya sido más difícil poner en práctica este modelo,
por la falta de libertad; un teletrabajador realizaba sus tareas los días laborales, pero
no tenía la libertad de salir a recrearse en su tiempo libre, ya que se estaba en
confinamiento.
Según (Pérez Sánchez & Gálvez Mozo, 2009) un estudio realizado en España sobre
mujeres teletrabajadoras que tenían a su cargo personas dependientes, en el cual el
30% pertenecía al sector público y el 70% al sector privado, arrojó que un 76.6%
trabajaban a tiempo parcial y un 23.3% trabajaba tiempo completo. Este estudio se
realizó a lo largo del 2007 para tratar de corregir y elevar el grado de participación de