Page 57 - MEMORIA 2019
P. 57

La familia Martínez-Taylor, según supe porque a cada rato lo decían, tenían orgullosamente un apellido compuesto
                                                                                                                         CUENTO
            que indicaba clase y se creían medio gringos, estaba conformaba por 5 miembros, dona Betita y don Tato y tres

            chiquillos malcriados y pedantes, que estudiaban en una escuela católica privada, de 14, el Junier, de 10 el Tatito
            que heredó el diminutivo del apodo de su padre y de 7 años, el benjamín, quienes tienen ahora de 19, 15 y 12 años.






            Como era fanática desde chica a los números, algo a lo que me apegaba porque no pude continuar después del

            sexto grado, debido a las condiciones de mi familia, a este trabajo y a la mezquindad de mis patrones que no me
            permitieron ir a la escuela para que no descuidara mis quehaceres, en mis ratos libres, especialmente antes de

            acostarme, realicé sendas matemáticas, llevando mis sumas en un cuaderno del cual nunca me alejaba y que llevaba

            a todas partes.  En mis matemáticas anoto mis actividades, los días o el tiempo y la cantidad de veces que hice tal o

            cual actividad, en los mil ochocientos veintiséis días que he trabajado aquí.





            Así, en estos cinco años he barrido y trapeado 3,652 veces, a razón de 2 veces al día, he preparado un desayuno diario

            para seis personas, un almuerzo diario para dos y cena diaria para seis; entonces he preparado 9,130 desayunos,

            3,652 almuerzos y 9,130 cenas, lo que hace un todo de 25,564 comidas; como fregar viene después de cocinar,
            he fregado los trates 5.478 veces, a razón de 3 veces al día, 25,564 platos grandes o platos hondos, 25,564 platos

            chicos, 34,694 entre vasos y tazas, cerca de 75,000 cubiertos; tendido 10,956 camas, a razón de 6 camas al día

            incluyendo la mía, he arreglado 7,304 veces los cuartos, a razón de cuatro cuartos por día; la sala, el comedor y la

            cocina las he arreglado una vez los días de semana y dos veces los fines de semana, con lo que se calcula que las he
            arreglado 16,434; como solo lavo la ropa los viernes y sábados, calculo que he lavado 520 días, a razón de 7 tandas

            de ropa cada día, he lavado 3,640 tandas de ropa.






            Desafortunadamente, el cálculo de las prendas de ropa lavadas resultaba imposible de llevar; sin embargo, cuando
            la lavadora se dañó, obligándome a ir a un lavamático, tuve que contar la ropa que llevaba para lavar y resultó que,

            en esa ocasión, llevé 7 camisas, 7 pantalones, 7 camisetas, 14 calzoncillos y 7 pares de medias del señor; 10 blusas,

            4 faldas, 5 pantalones, 16 panties de la señora; de los chicos 15 camisas de uniforme, 4 pantalones de uniforme, 21

            camisetas de estar en casa, 45 calzoncillos –algunos cagaos –, 15 pares de medias azules y 8 blancas.  Un total de
            185 prendas de ropa llevaba en esa ocasión, lo que, multiplicado por las 3,640 tandas de ropa, da un total, que debe

            ser aproximado, pues no puedo asegurar que siempre ha sido esa cantidad, de 673,400 prendas de ropa.






                                                                                                                    59
   52   53   54   55   56   57   58   59   60   61   62